El cambio climático y los problemas generados por la
contaminación es algo que está presente en nuestro día a día, por eso, como
mentes inquietas que somos hemos decidido abordar estos temas desde una
perspectiva algo más positiva, a través de un caso de éxito: el de Alemania en su carrera por el reciclaje.
Alemania ha sido reconocido por el país que más recicla en
el mundo, seguidos de Austria, Corea del Sur y Gales. Estos países destacan
porque han sido capaces de alcanzar una cifra superior al 50% en el reciclaje de la basura municipal.
¿Qué hacen países como Alemania o Austria para favorecer el reciclaje?
Dentro de las medidas tomadas por los gobiernos de estos
países, se favorecen leyes que se consideren como incentivos financieros
para la población cuando reciclan, invierten dinero en actividades de reciclaje
y por supuesto animan a su población a reciclar con una educación oportuna
sobre la importancia de realizar estas tareas de manera diaria.
En este sentido, los alemanes destacan por tener una conciencia
clara de cómo reciclar, y no solo lo hacen con el plástico, el papel o el vidrio, sino que incluso tienen su propio
sistema en el que se pueden separar solamente los desechos orgánicos susceptibles
de convertirse en compos, es decir, todo aquello que se considera orgánico como
restos de comida como la piel de las patatas o de la fruta, se pueden reciclar
con el objetivo de crear fertilizantes.
Otra de las medidas que destacan dentro de esta estrategia
que, apuesta por el reciclaje, es que en Alemania exista una tasa por utilizar botellas de plástico o de
vidrio, que una vez las reciclas se te devuelve. De esta manera en los
supermercados hay máquinas que nos darán 25 céntimos de euro por una botella de
plástico y 8 céntimos por una de cristal.
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