Qué alegría es ver cómo cada vez más grandes empresas están tomando nota de la importancia de trabajar por el medio ambiente al reducir el consumo energético. Lo han hecho ya notables nombres de la industria y ahora se une a ellos El Corte Inglés, una de las cadenas de tiendas de mayor referencia en España.
Objetivos cumplidos
Desde que El Corte Inglés trabaja de forma consciente, protegiendo el medio ambiente y esforzándose para marcar diferencias, siempre se ha marcado objetivos concretos. En el plan que comenzó en 2008 y que terminó en 2015 se habían estipulado una serie de reducciones que se han cumplido sin problemas. La compañía ha reducido un 35% el consumo energético, lo que se representa gracias a una reducción de kilovatios consumidos cada hora por cada uno de sus metros cuadrados en un 1,15%.
Esto lo ha logrado aplicando nuevas ideas y técnicas que han hecho de El Corte Inglés pionera en muchos de los aspectos de su día a día. Han desarrollado nuevos métodos, por ejemplo, para la gestión de energía en instalaciones de frío, aspecto en el cual la bajada ha llegado al 50%. También han introducido nuevos sistemas que permiten ahorrar energía pero aumentar la visibilidad para revisar mercancías. Otra de sus ideas ha sido trabajar con el mobiliario mediante la campaña retrofit que les ha aportado aún más beneficios.
Reducción generalizada
El Corte Inglés reduce todos los consumos tal y como se recomienda a nivel mundial. Ha reducido la energía como indicamos, pero también el agua, los materiales y componentes, así como otros elementos contaminantes que merece la pena limar en cuanto a la gestión. Por ejemplo, han mejorado en la gestión de residuos y en la liberación de gases invernaderos. Otra buena medida es que han aumentado a un 28% la energía que adquieren de fuentes renovables. Con estos datos siguen avanzando de forma muy consciente hacia el éxito entre la sociedad.
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